En el día de la Maratón de Lectura en Argentina, yo compartí la lectura del libro vivo que es un narrador, un ser humano que cuenta con otros, en la Escuela 895 de Desvío Arijón. Niños de 5 a 13 años, compartiendo juegos sobre héroes y heroínas, luego me regalan cuentos que inventaron, piratas modelados basados en historias de grandes autores de la literatura. Un mensaje hermoso en el pizarrón «Marcela Sabio es lo más» «Marcela Sabio los chicos te queremos». Familias que acompañaron también esta jornada de gozo, de disfrute, de construcción, de sueños, y de los magníficos viajes y aventuras que la lectura no s ofrece día a día. La presentación que hace
Marina, excelente docente de Coronda y de esta escuela, me conmueve hasta las lágrimas. En alguna de las fotos están sus palabras. El último párrafo me compromete aún más con este arte, este oficio de «palabrera». Vernos a todos al aire liibre, debajo de los árboles contando , reinventando y cantando historias, me remonta a lo que seguramente habrá sido este ritual ancestral de la palabra creadora, y me hace creer aún más en que -parafraseando a Eduardo Galeano- seguimos creyendo en este mundo que aunque a veces parece tierra arrasada por las guerras, sabemos (y aquí se comprueba( que está «preñado de maravilla». GRACIAS A TODOS!!!!!
